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El Scud II es una planeador británico
fabricado durante los años 30 por la sociedad Abbott- Baynes Sailplanes,
cuyo precio en aquella época era de £150 (225$). |
Cada semana trataré de poner nuevas fotos, en función de como vayan avanzando los trabajos... La maqueta está construída según los planos publicados en la revista RCM n°237 de enero de 2001, presentada por Damien Rouxel. De cualquier forma, he agrandado los planos un 20% de manera de obtener una envergadura de 3,00m y una longitud de 1,22m, es decir, una escala de 1/4. Descargar el artículo de RCM - 1.5 Mb |
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Parte superior del fuselaje. Plancha de contrachapado de okoumé de 3 mm, y cuadernas anteriores del mismo material. Las cuadernas posteriores son de balsa de 3 mm, y los largueros, de madera de samba de 4x4 mm, los obtengo a partir de un listón de 10x10 mm de 2 m de largo. |
El fuselaje toma forma. La cabana, en cuerda de piano de 3 mm, tiene que ser realizada con precisión, de ella depende el calado de las alas. Su montaje se realiza con ligaduras de hilo de cobre (de cable telefónico) soldadas con estaño. |
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Método para ajustar los refuerzos: pegar con cianocrilato, lijar, trazar la curva, y cortar aproximándose a ella con una hoja X-Acto 11 nueva. |
Sólo queda darle el acabado, con el minitaladro provisto de un cilindro de lija (tapón de medicamento homeopático, tornillo de 2 mm que sirve de eje, y papel de lija pegado con cola de contacto) |
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La Deriva: no menos de 65 piezas de madera a ensamblar, un trabajo diferente y mucho más agradable que la actual moda del Depron... |
La articulación del estabilizador monobloc se compone de un tubo de carbono de 6 mm, en el que se introduce a presión cada semiestabilizador. Con el fin de que éstos no pivoten sobre el eje, he pegado en las extremidades del mismo unas lengüetas en placa de epoxy, que se introducen en los extremos aplastados de los forros de tubo de latón. |
19 Agosto 2001
Preparación del piloto: el modelado demanda un largo tiempo de secado, así que he decidido comenzar. El cuerpo es una estructura de hilo de cobre, recubierta de espuma y después vestida. La cabeza y las manos están modeladas en una pasta de papel que se puede comprar en las tiendas de artículos para artistas (papel maché).
Una vez modeladas, las dejamos secar hasta que el exterior esté bien seco, por lo menos, en un espesor de unos 5 mm; entonces, hay que vaciarlas con una herramienta de modelar. Tras unos cuantos días de secado, cuando ya esté todo bien duro, podremos realizar los rasgos de la cara con la ayuda de pequeñas fresas (del tipo de dentista). Terminaremos por pintar con los pequeños botes de Humbrol mate (blanco, rojo, beige) probando los colores sobre nuestras propias manos.
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